Toda persona, generalmente, desde que se levanta hasta que se
acuesta, lucha cada día por conseguir una cantidad de dinero que le permita
vivir cómodamente. Es así desde el principio de la Humanidad cuando el hombre
primitivo salía a cazar y a recoger frutos. Pero no todo el mundo se gana la
vida de la misma manera ya que podemos encontrar diferentes maneras de trabajar
que pueden ser, básicamente, por cuenta propia o para un tercero y dentro de
ésta última para una empresa privada o un ente público. Cada una tiene sus
ventajas e inconvenientes pero sólo nos centraremos en el trabajo por cuenta
propia.
La ventaja más visible de trabajar
por cuenta propia es que nadie te manda ni ordena ya que eres totalmente libre
para hacer lo que creas conveniente en cada momento. Otra ventaja es que trabajas
con tu propio horario como consecuencia de organizar adecuadamente el tiempo según
el ritmo de dedicación. Puedes haber momentos de mucha ocupación pero luego
puedes gestionar a tu gusto los días libres.
Por otra parte, hay una serie de inconvenientes,
siendo el más importante que tus ingresos mensuales no son fijos ya que éstos
dependen de las cantidades que vayas cobrando de tus clientes.
Además, puedes perder dinero, mucho
dinero. Para ser auto empleado has de montar tu negocio y para ello has de
invertir dinero que lo puedes perder si la empresa no consigue beneficios.
Valorar si trabajar por cuenta
propia es mejor o peor que ser un asalariado es muy difícil ya que depende de cómo
es cada persona ya que sus ventajas e inconvenientes son de un valor muy personal.
Depende de cada uno. ¿Y de ti?
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